COMUNIDAD YOREME-YAQUI PLASMARA EN CUADRO DANZA DEL VENADO QUE SERA EL SIMBOLO DE LAS FIESTAS DE CUARESMA y SEMANA SANTA.

Santa Rosalía, BCS.- A partir de la fecha y durante los próximos días, la Comunidad  Yoreme-Yaqui estará trabajando en la elaboración de una pintura en cuadro que una vez concluida será el símbolo que enarbole las tradicionales fiestas de Cuaresma y Semana Santa y será colocada en el interior de la “Ramada”  lo anterior lo hizo saber Ramón Cota Rivera Fiestero Mayor quien confirmo que dicha pintura en cuadro se trata de la tradicional  “Danza del Venado”.

La Danza del Venado sera pintada en cuadro por la Comunidad
Yoreme-Yaqui y lucira en la Ramada.
Entrevistado en exclusiva previo al acto donde Niños (as) del Jardín Francia de la Colonia Cuauhtémoc habrían de  presentar  un proyecto cultural referente a la tradición de Cuaresma y Semana Santa  donde la Comunidad Yoreme-Yaqui estaría presente apoyando este interesante programa cultural, Cota Rivera comento que la Danza del Venado es una danza ritual celebrada por los indígenas de Sonora y Sinaloa, esta danza es una dramatización de la cacería del venado que viene siendo  héroe cultural de estos pueblos y es ejecutada por parte de los paskolas (cazadores).
El Fiestero Mayor sostuvo que en cuanto a los instrumentos que son utilizados en esta danza, se encuentran la "baa-wehai" o bueja (tambor de agua) un recipiente grande que puede llegar a ser de barro, madera, metal o plástico;  esta se queda fija y es llenada de agua hasta el borde.
En esa agua se coloca una jícara que flota y tiene un pequeño orificio para ser sujeta con un cordón  y así poder controlarla fácilmente con la mano izquierda,  sin que flote a la deriva;  la jícara se puede percutir por la parte convexa por medio de un pequeño trozo de madera cubierto de una hoja seca de maíz  que se sujeta con un cordón de ixtle, llamado "baa jiponia" y se toma con la mano derecha.
También están los "hirúkiam" o frotadores hechos de “Varas de Brasil”  con algunas ranuras (una es delgada y larga y la otra es lisa y más pequeña) y que al frotarlas producen  un sonido parecido a la respiración agitada del Venado.
En la Danza del Venados participan dos músicos de "hirúkiam", el primero domina los cantos primitivos y los entona en lengua yaqui, los instrumentos del danzante producen sonidos con sabor a tierra, agua y aire  ya que son completamente silvestres y naturales que impactan profundamente en los espectadores.
El Venado, (animal principal de la danza de este nombre)  se cubre la cabeza con un paño blanco que se amarra fuertemente hasta la altura de los ojos dejando caer las puntas de la tela hacia atrás;  sobre la cabeza y sujetada con correas bajo la barbilla  se ajusta una cabeza de venado disecada adornada con cintas de color, mascadas o flores de papel o naturales.
Quien caracteriza al Venado lleva en el cuello rosarios o collares de chaquira blanca con medallas y el torso queda desnudo,  de la cintura a la rodilla se lía un rebozo azul  a quizá de enagüilla y se lo sujeta con una ancha faja de lana azul o negra, sobre la faja se coloca el "grijuútiam" (cinturón de pezuñas de venado) o un cinturón con grandes cascabeles colgantes y en las manos lleva dos grandes sonajas de bules llamadas “Senasos”.
Por su parte, comenta Ramón Cota Rivera;  los Paskolas llevan la cabeza descubierta y lucen un mechón de cabellos  que llaman "vela"  sujeto con una cinta de color enrollada en la parte superior de la cabeza y en el cuello llevan collares de chaquira blanca y negra con medallas; sujeta a la cabeza llevan una máscara de madera decorada en blanco y negro con bigote, barba y cejas de ixtle;  esta máscara se pone detrás de la cabeza  y se la colocan en la cara cuando bailan determinados pasos.
La Danza comienza con la música que toca la flauta de carrizo y un tambor y aparece el venado con el sonido de las sonajas, su actitud es imitativa a los movimientos del animal, entonces; cuando inicia una batalla el venado fulminado por la flecha inicia una lucha con la muerte y aunque le faltan las fuerzas y se desvanece, se levanta trémulo, en ese momento se escucha el tambor que representa los latidos del corazón del Venado  este se levanta tembloroso y se niega a morir sintiendo fuertes sacudidas en su cuerpo y es donde empiezan los espasmos y calambres y a pesar de su intento por levantase todo resulta ser fallido hasta quedar totalmente inerte.   
Por último, Ramón Cota Rivera Fiestero Mayor invita a la población en general a que se una a esta tradición centenaria que celebran año con año  la Comunidad Católica y la Comunidad Yoreme-Yaqui.